La idea de minimalismo musical es mucho más amplia de lo que la mayoría de la gente piensa. Suele incluir por definición cualquier música que se implementa con una pequeña, mínima o limitada cantidad de recursos musicales, en nuestro caso, jugando con las combinaciones para dos instrumentos: guitarra y piano, guitarra y harmónica, bajo y piano, bajo y harmónica, teclado y guitarra o bajo, en ocasiones complementado con vocalizaciones. Pueden ser piezas que expresan todas las graduaciones entre dos o tres notas, como puede ser
La Re y Mi. Una pieza con un tiempo lento que tiene una densidad musical de dos o tres notas por minuto, quizá por ello nos identificamos con el Blues cuya estructura musical nos permite manejar rítmica muy lenta,
triste (blue), melodiosa, armónica y muy
"cachonda" que invita a contonear el cuerpo,
de ahí nuestra inclinación hacia los tonos menores. La relevancia del movimiento minimalista hizo que existieran otros derivados o epónimos, en otras áreas del arte, como por ejemplo en la escultura, la arquitectura, etc. en todos ellos los "simple" y lo repetitivo aparece como expresión de lo "mínimo", lo "obvio" en las formas, lo "geométrico" y siempre evitando lo decorativo, lo excesivo. La belleza de lo simple sin perder la escencia original, esa pulsión de vida inherente a una composición musical. Es por lo anterior y nuestro paradigma musical, el Blues, que decidimos llamarnos:
"Blues Minimalista". Para cualquier información y/o contrataciones locales, usa el "Minichat" aquí mismo.